Una calle con mucha historia es la cuarta cuadra del Jirón de la Unión: la antigua calle de Mercaderes.
Desde tempranas épocas de la fundada ciudad de Los Reyes fue una vía de comercio. En uno de sus frentes estuvieron las mansiones de Nicolás de Ribera el Viejo, y Nicolás de Ribera el Mozo.
En el siglo XVIII ya era una vía de mucha actividad comercial con pulperías, y también joyerías, y casas de cambio, además de librerías, y algunas instituciones de gobierno como el Tribunal del Consulado.
En el siglo XIX continuarían los negocios, esta vez con mayor número de extranjeros entre sus propietarios. Aquí se ubicaría el local del primer banco fundado en nuestra ciudad, el Banco de la Providencia. También hoteles y fondas. De manera silenciosa vería el paso del ejército de ocupación en enero de 1881 durante la Guerra del Pacífico.
Banco de la Providencia - Foto "La República Oligárquica", Juan Luis Orrego (Lexus, 2000) |
La aparición de los primeros autos en la ciudad convertiría esta vía en una de doble sentido, una de las primeras tiendas de ventas de auto marca Dodge estaria ubicada aquí. Sería el epicentro de la apoteosis del Carnaval de Lima con los grandes desfiles de corsos y las famosas batallas de flores y agua perfumada de los conocidos chisguetes Amor de Pierrot y Amor de Colombina.
Carnaval de Lima 1928 - Foto: Municipalidad de Lima |
Negocios que dejarían gratos recuerdos en el imaginario popular se establecerían en el siglo XX, como la Casa Welsch, famosa joyería limeña. También la Casa Leonard, donde se vendían aguas medicinales entre ellas la famosa Timolina Leonard. Otro negocio ya existente desde el siglo XIX, sería el punto de encuentro de todos los que les gustaba jironear, y me refiero a la Botica Francesa.
Toda la sociedad limeña pasaría por los salones de Fotografía Central Courret en su bello edificio de estilo art nouveau, construido en 1905. El primer autoservicio de Lima estaría ubicado en esta calle, era la tienda Toma y Daca, cuya originalidad se menciona en una crónica de la revista Caretas en los años 60.
Inauguración de "Toma y Daca", 1963 - Foto: Blog limadeayeryhoy |
Se volvería a peatonal en los años 80 y a pesar de los esfuerzos para que siga siendo el epicentro de los limeños la decadencia también llegó. Sin embargo hoy es una vía que a diario es recorrida por miles de personas que absortos en el comercio o en sus propios asuntos pasan por alto los detalles de su hermosa arquitectura, y la historia que nos cuenta cada fachada y cada puerta de nuestros antepasados y sus vivencias.
Texto: David Pino
0 comments:
Publicar un comentario